Corky, otro «gran gato»

septiembre 29th, 2009
Corky

Aquí os presento a otro "gran gato", Corky.

Ante semejante gato no se puede poner otro adjetivo, grande.

La historia de este gato es muy parecida a la de muchos gatos callejeros como yo.

Sus "gatos gordos" le encontraron con dos meses comiendo las sobras de un McDonald en el parking del Carrefour de Rivas-Vaciamadrid

Les dió mucha pena; estaba muy sucio, lleno de grasa de los coches. Así que decidieron llevárselo a casa, a pesar que les hizo frente y tuvieron que "cazarle" con una toalla.

 

La idea era lavarlo, llevarlo al veterinario y buscarle otro hogar. Pero lo que suele pasar, que el gato entró y ya no se marchó e hizo de esta casa su nuevo territorio.

Por supuesto que esta dominación tuvo sus sacrificios; Corky entregó amablemente sus "joyas de la corona" cuando empezó a marcar la ropa y a dar la lata por las noches.

A pesar de que es un poco "cabroncete", el macho-humano le quiere mucho y hasta le puso mosquiteras en las ventanas para que pudiese cotillear la calle seguro.

Al poco tiempo vino un bebé precioso que podría haber hecho peligrar su hegemonía; pero Corky decidió aliarse con ella, compartir su sueño al pie de su cuna y cuando se hizo un poquito más mayor dejarse hacer todo tipo de perrerías.

Eso sí, cuando ya se harta un poco y le apetece desahogarse, se va a por el otro macho-humano de la manada, le pega un repaso y le canta las cuarenta. Y es que en esta casa está muy claro quien manda y Corky se lo demuestra al otro macho-humano de la manada cuando le viene en gana.

 

Cuando el «gran gato» se viste Copito huye

septiembre 22nd, 2009
Copito en su escondrijo

Cada vez que el "gran gato" va a la habitación y se cambia de ropa para salir a la calle, sé que algo muy malo va a pasar.

Seguro que, o bien va a venir un extraño, o bien me va a llevar al veterinario, o bien nos vamos a coger el tren a casa de los "gato abuelos".

Cualquiera de estas cosas horribles y estresantes podría pasar. 

Por eso, cada vez que veo que el "gran gato" se "viste de largo" me pongo en estado de alerta. Los ojos grandes como platos, el rabo metido entre las patas y con todos los músculos en tensión para iniciar la carrera a "mi escondrijo".

Y este es el escondrijo que me gusta, detrás del water. Pero sólo cuando el "gran gato" se "viste de largo", no en otras ocasiones.

Muchas veces se cambia de ropa y no vamos a ningún lado; o simplemente va a la habitación a coger algo. Pero yo, por si acaso me voy al escondrijo "cuando el gran gato se viste de largo"; porque como yo digo más vale gato escondido que gato en el transportín metido.

Porque cada escondrijo tiene su razón de ser…

Por cierto que vaya susto que nos ha dado Tiger. Menos mal que no le ha pasado nada en su caída… Yo soy muy aficionado a subirme al alfeizar de la ventana, pero con más peligro porque nosotros vivimos en un cuarto. Siempre que me subo "mi gata" está muy pendiente y no me deja hacer nada raro. Yo suelo ser muy prudente y no hago amago de hacer  ningún equilibrio extraño y si lo hago me regaña y me llama al orden. 

Tiger

septiembre 16th, 2009

Hará un mes que mi querido gemelo nos dejó. Sé que a muchos nos entristece su ausencia sobre todo a sus "grandotes", pero de todos los habitantes del pisito de Barakaldo, quien más notaba la "cestita observatorio" vacía era Ambulancio.

Nuestro Ambulancio jugaba mucho con mi gemelo, eran dos compinches de cuidado.  

Los grandotes de Barakaldo pensaron en traer un nuevo gato de acogida, para que hiciese compañía a Ambulancio. Y así ha llegado Tiger.

Mi gemelo ha sido un maestro de primera en el movimiento copitil. Es por ello que ahora sus alumnos aventajados en el copitismo nos relatan las aventuras de Tiger con todo lujo de detalles. 

Soy la pequeña Wendy de Barakaldo.

Te paso noticias del nuevo inquilino temporal del pisito de Barakaldo: Tiger, un pedazo de tigre…

Tras la falta de tu querido hermano Copito de Barakaldo, los grandotes decidieron tener otro gato de acogida temporal (los últimos fuimos Ambu y yo, y mira el tiempo que llevamos en casa!; hacía mucho tiempo que no pasaba por aquí un nuevo felino, aparte de la fugaz estancia de Miguelito "el pequeño peluchón", no sé si lo recordarás…) para que no estuviera en la perrera hasta que le salga una casa, y que fuera un gato macho y grandote, para que jugara con Ambulancio, que se ha quedado muy solo tras la falta de Copito. Aunque la verdad que hasta ahora no han jugado nada… 🙁

Así llegó Tiger a casa, tras pasar por la perrera tras años en una casa de la que lo abandonaron (ahora creemos que es el gato más viejo de la casa).Se pasa todo el día en la cestita observatorio dormido, pero de vez en cuando le dan arranques y nos persigue por la casa, pero sobre todo a Ambulancio (los grandotes dicen que son los dos machos dominantes y es normal).

Afortundamente ahora está más tranquilo. Sigue pasando infinitas horas en la cesta medio sobado, y cada vez nos ataca menos. Ambu lo empieza a tolerar, y Muxu pasa de él completamente (se esconde en el baño, se sube a la cabecera del sofá de los grandotes cuando lo ve…). Es curioso, pero pese a lo grandote que es come poco, y con poca ansiedad (a diferencia de nosotros, que esperamos con mucho ansia el cuenco de pienso, él va de vez en cuando a comer un poquito).

Yo fiel a mi temperamento huidizo no he hecho buenas migas con él, aunque eso no es novedad… De todas formas no tengo problema, porque con lo enana que soy me meto en cualquier lado y me paso el día escondida, salvo cuando hay comida! Creo que nunca lo comentó tu gemelo, pero sé abrir los armarios sin problemas y paso allí largos ratos de meditación y reposo (un par de trajes del grandote sufrieron por eso el destrozo de mis uñas hace un año).

Esperemos que Tiger encuentre pronto una casa, que en el fondo es buen gato! 🙂

En cuanto a mí, el otro día me llevaron al vete a hacer la revisión anual (la primera como "gato oficial y dueño del pisito de Barakaldo") y me porté muy bien. El vete dijo que no era enana, que estaba muy bien de peso y que no era una gata inadaptada porque me porté muy bien. Como doy el pego cuando quiero! 🙂

En fin, Copito… La vida sigue en Barakaldo, y una cosa que nos alegra mucho es seguir las noticias de tu blog!

UN PEQUEÑO MAULLIDO!!

LIITTLE WENDY

A mi también me alegra mucho saber de mis amigos de Barakaldo.

Ambu y Tiger 

Ambu y Tiger: Juntos pero no revueltos

Tiger en la cestita observatorio 

Tiger en la cestita observatorio, donde tantas horas pasaba mi gemelo.

Muxu pasando de Tiger 

Muxu pasa de todo, pero sobre todo de Tiger 

¿Por qué ronronean los gatos?

septiembre 7th, 2009
Copito ronronea en cualquier situación

"Mi gata" me hizo el otro día una pregunta muy interesante… "Copi, chiquitín… ¿por qué ronroneas tanto?" Y es que aquí dónde me veís soy un "ronroneador compulsivo".

Para mí, cualquier ocasión es buena para ronronear… Si me ponen comida, si me acarician la barriga, si me cepillan, si me subo en el hombro izquierdo del "gran gato"… incluso, a veces, con tan solo que "mi gata" me hable es suficiente… Sólo necesito una excusa para iniciar un ronroneo alegre y sonoro.

El "gran gato" me dice que debo tener un buen motor interno. A veces me gasta la broma de darme cuerda con el rabo, y debe funcionar, porque cuando lo hace ronroneo más.

"Mi gata" se puso a averiguar por internet el tema del ronroneo y se ha sorprendido mucho al leer que no se sabe a ciencia cierta de dónde sacamos los gatos este particular ruidillo.

Según las últimas investigaciones se relaciona con el flujo sanguíneo. Los vibración se originaría en la vena cava posterior, en el lugar donde atraviesa el diafragma. La contracción de los músculos comprime el flujo sanguíneo y crea una transformación de flujo suave a fuerte. Estas vibraciones son amplificadas por los bronquios llenos de aire. 

Lo que más le ha sorprendido a "mi gata" es que el ronroneo puede indicar tanto placer como dolor; parece ser que en estados de enfermedad, podemos ronronear para mostrar nuestro dolor o estado de ansiedad.

Lo que sí sabía "mi gata" es que cada gato comunica con un ronroneo diferente. Así como mi prima Trinity ronronea en un susurro discreto, yo lo hago de forma apasionada y entusiasta. 

Hay dos tipos de ronroneo: el post apreciativo o agradecido, que es aquel sonido que el gato dedica a quien le da algo de su agrado, y el anticipatorio, que es el que emite para conseguir lo que desea en ese momento. 

Yo os puedo asegurar que practico todos los ronroneos posibles, porque después de dormir es mi principal actividad a lo largo del día.

Hace calor…

agosto 25th, 2009

¡Vaya semanita que llevamos de calor!

Eso es lo que dicen los "gatos gordos". La verdad es que yo lo llevo un poco mal con el abrigo de pieles que llevo encima todo el año.

Pero aún así hay veces que, por mucho calor que tenga, pueden más mis genes de gato.

Porque, ¿hay gato que se pueda resistir al refugio que ofrece una maravillosa manta?

 

Hace calor pero yo me cubro por si acaso