En estos días sólo hay un término que lo inunda todo: "CRISIS".
Y yo, como curioso Copito que soy, me pregunto: ¿Qué es eso de la crisis?
La crisis es, quizás, como cuando mi plato de comida está vacío.
Pensemos en el delicioso pienso que guarda "mi gata" en el armario de la cocina; yo he visto la bolsa enorme, un gigante de olorosas promesas de miles de venideras comidas.
Me imagino a mi mismo, rodeado de kilos de aromático pienso, regodeándome en esos deliciosos sabores de pavo, pollo, carne…
Pero cuando esa visión me impele a acudir presto a mi cuenco de comida, me encuentro que inexplicablemente está vacío.
"Mi gata" me promete una medida diaria de alimento; el justo para no expandirme y ser como mi vecino Trasto, igual de largo que de ancho; y aunque ella me avisa que racione mi medida, mi ansia devoradora es mayor y no puedo evitar comerme antes de tiempo toda la ración.
Y es que es muy dificil contenerse, sobre todo cuando pienso que tengo pienso para rato guardadito en el armario…
La crisis debe ser como cuando ese juguete, que antes apenas te molestaba mientras dormitabas, ahora es un incordio, un peso sobre tu lomo… y te preguntas como hasta el día de hoy podías convivir con semejante carga… Teniendo en cuenta que además tienes mas juguetes que aunque pequeños, ocupan espacio y recursos en tu existencia.
Ante la crisis presente en todos los medios de comunicación, no me quiero dejar llevar por el pánico… así que mejor opto por una actitud muy felina, y aquí me quedo… esperando a tiempos mejores.