Estas vacaciones los «gatos gordos» han ido a visitar a mi primo Newton de Santander.
Mi primo Newton se conserva en muy buena forma como siempre… Dicen las malas lenguas por ahí que le sobran unos kilillos… ¡Qué va! ¡Yo creo que sólo está un poco rellenito! ¡Juzgad por vosotros mismos!
¡Vaya cuerpo serrano! Hay que alimentarse muy bien para mantenerlo.
Aquí Newton nos mira exigiendo un incremento en su ración, porque la que le hemos dado le parece poco.