Más consecuencias del «pitufamiento» de los gatos gordos

mayo 12th, 2008

    Además de que mi tiempo ya está de por si bastante reducido para mis ocios varios, tal como teneros informados, mantener los destrozos de mi rascador con un nivel aceptable y asegurarme que no queda en mi plato ni una sola bolita de mis ricas croquetitas, han venido a unirse más obligaciones de "gato-pitufado".

     Y es que, desde el "pitufamiento" de los gatos gordos, no he tenido tiempo ni para ronronear.

    La última de mis obligaciones adquiridas es la de comprobar y testear este nuevo elemento de descanso y sesteo para mi territorio.

 

Estamos tan agustitoooo

 

¡Un nuevo sofá para gatos ha llegado a nuestro hogar!

 Al principio me sentí un poco intimidado por el "cambio olorífico" y de disposición, ya que el antiguo "reposagatos", se ha movido, por iniciativa propia,  a un lateral… y ahí está, a la espera de no sé que evento memorable, ya sea recogida por algún interesado o por el ayuntamiento el día que le corresponda.

 

Pero que si que estamos tan agustitooooo

 

    Pero, como os habréis imaginado, en cuanto mis mantas y demás estuvieron dónde tenían que estar, tome rápida posesión del nuevo sofá para gatos. 

    Parece ser que, como premio al "pitufamiento" de los gatos gordos, amigos y familiares han decidido agasajarme con regalos y nuevos elementos que hagan mi vida gatuna, ante los múltiples inconvenientes de tener que atender a los "gatos gordos pitufados", aún más cómoda.

 

Los dos estamos muy agustito

 

Así que, tanto perro-vizco-y-azul como yo, probaremos con mucho tesón el nuevo sofá, y reportaremos el consiguiente informe. Desde aquí  damos las gracias a la familia de los gatos gordos por acordarse de los que realmente sufrimos las consecuencias del "pitufamiento".

¡Gracias por el regalo!

NOTA DE ÚLTIMA HORA: Nuestro Corresponsal del Norte nos ha informado por varios medios, incluido este vuestro territorio, de que muy pronto habrá otro pitufamiento, aunque esta vez de los grandotes de la Sucursal del Norte. Desde la Sucursal del Centro damos la enhorabuena a los grandotes y nuestro acompañamiento en el sentimiento gatuno hacia mi gemelo Copito de Barakaldo, la bella Muxu y el nuevo aprendiz a "copitista", Ambulancio (Ambu para los amigos), recientemente adoptado. ¡Sed pacientes con el atontamiento generalizado que sufren los gatos gordos-grandotes con el pitufamiento!¡Por suerte os tienen a vosotros para mantener el orden en el territorio! ¡Enhorabuena!

Primeras consecuencias de la visita a mis abuelos

abril 28th, 2008

 

Barriguita

La primera, y más visible consecuencia de mis vacaciones en casa de los gato-abuelos, es esta incipiente barriguilla.

La gata-abuela se ha ocupado con mucho tesón, y a las pruebas me remito, de cebarme en estas semanas en las que he ampliado mi territorio en zonas de la sierra.

¡Y es que, en el intervalo de tres semanas me ha dado la comida que tardo mes y medio en comerme!

Yo como buen gato no me he quejado. ¡Válgame el cielo! ¡Cualquier cosa antes que disgustar a la gata-abuela!

Y total, que es un kilillo de más… Además, estirando un poquito el pelaje yo creo que se disimula…

Eso sí, mi gata lanzó una especie de berridito cuando me pesó. Y todo porque no podía conmigo cuando me trajo de vuelta al territorio de Madrid. ¡Qué gata más floja! ¡El gran gato no se quejó tanto!

La segunda consecuencia… una falta de carencia afectiva de mis amados elementos plásticos. Si algo he echado en falta son las tiernas caricias y  las sugerentes texturas de mis plásticos favoritos.

 

Mis plásticos

Y es que, lo primero que hice al llegar a casa fue aposentarme, y por supuesto no moverme en horas, sobre ellos.

Mis plásticos

 

¡Oh! ¡Mis amados plásticos! ¡Cuánto os he echado de menos!

¡Ya estoy aquí!

abril 21st, 2008

Sí amigos, el mismo que viste y calza…

El gran Copito, el gato con botas, ha vuelto.

Mis merecidas vacaciones en casa de los "gato-abuelos" han llegado a su fin.

Y este retiro en la sierra madrileña me han servido no sólo de descanso, sino también de reflexión sobre la  próxima dominación gatuna del planeta.

Cómo dice mi amada y admirada Anita… MUHAHAHAHA.

 

Nos «pitufamos»

marzo 27th, 2008

¡Hola amigos!

     Llevo una temporada descuidando mi dominio virtual, pero hete aquí que hay una razón de peso…

    Estaba yo ocupado en mis siestas, como mis responsabilidades de gato exigen, cuando mis sentidos percibieron cierto estado de ánimo especial. Estas sensaciones no me son del todo desconocidas, pues como buen gentlecat que soy, asocié rapidamente esta excitación en mi hogar con los inequívocos lazos del amor.

     Así que, ni corto ni perezoso, fuí directamente a hablar con el gran gato, porque estas cosas hay que hablarlas bigote a bigote, como dos gatos, y no andarse con rodeos.

    El gran gato fue muy claro y me demostró que sus intenciones son honestas, así que no pude más que rendirme a las evidencias y aceptar unos hechos ya consumados.

    Así que, mi gata y gran gato, tenéis mi bendición para vuestro enlace pitufil. Sé que el gran gato cuidará bien, aunque dificilmente mejor que yo, de mi gata. Y por supuesto os seguiré dejando compartir parte de mi territorio, porque no soy tan mal gato como para echaros de casa.

    Cómo sé que necesitáis de vuestra intimidad, me iré estas tres semanas a casa de los gato-abuelos. Así también aprovecho y me tomo un merecido descanso; así que, copitos míos, sé que me disculparéis por la falta de actualización de mi territorio virtual estos días venideros, pero de verdad que todas estas emociones ma han agotado un poco.

     ¡Felicidades a los gatos gordos!

¡Nos pitufamos!¡Nos pitufamos! 

Luna: angelito de día, vampira de noche

marzo 14th, 2008

Seguro que todos recordáis a Luna, la gata vampira de Getafe; yo creo que más de uno hemos tenido pesadillas al rememorar su imagen.

Pues que sepáis que, la personalidad de nuestra amiga va más allá… Como heroína de una realidad alternativa al uso común de los superhéroes, nuestra Luna lleva una doble vida…

Y así, todo su terrorífico aspecto de gata vampira, desaparece por arte de magia y la transforma en un dulce angelito que vela por los dulces sueños de su ama.

 

 

Luna, el angelito

 

Por suerte, tenemos un intrépìdo reportero que, arriesgando su integridad física, nos retransmite los documentos gráficos que demuestran tan interesante vida felina.

Y es que la personalidad vampírica de esta gata puede aparecer de improviso en cualquier momento.

¡Gracias por tu valentía amigo!